La hoja seca del árbol de ginko biloba ha tenido utilidad medica por miles de años. En más de 100 estudios en los último 30 años se investigó la capacidad del ginko para mejorar el riego sanguíneo en una diversidad de circunstancias, que incluyen alteración de al memoria, demencia vasculopatía periférica, vértigo, zumbido, asma, ansiedad y mal de la montaña agudo.
La German Commision E aprobó una forma estandarizada del extracto de hoja de ginko para el tratamiento de la alteración cognitiva y la claudicación intermitente. Entre los compuestos activos de dicha hoja están los flavonoides (con actividad antioxidante) y las lactonas de terpeno (con actividad antagonista del factor activador de plaquetas) por lo que disminuyen la coagulación sanguínea. Además, los extractos de ginko incrementan sustancias que pueden contribuir a su efecto beneficioso sobre la memoria y estado cognitivo.
Entre los estudios que se han realizado para valorar su eficacia, no se han encontrado beneficios significativos en pacientes con demencia, sin embargo, sí se demostró menor deterioro de la memoria.
En general, los adultos sanos toleran bien el ginko a las dosis recomendadas hasta por seis meses; se presentan reacciones alérgicas en la piel, trastornos gastrointestinales y dolor de cabeza en menos del 2% de los pacientes. Por su acción en el factor activador de plaquetas, se sugiere tomar con precaución en pacientes con enfermedades hemorrágicas o que toman anticoagulantes.
También se ha valorado el ginko por su efecto en la claudicación intermitente. Uno de los estudios mostró un efecto leve del tratamiento en el incremento de la distancia de caminata sin dolor en favor del ginko. Las pruebas son insuficientes para apoyar la eficacia del ginko en el tratamiento de zumbidos, mal de montaña agudo o vértigo.
Se ha vuelto una práctica común recurrir a la medicina complementaria y alternativa, por lo que es importante que tanto el médico como el paciente conozcan las verdaderas utilidades de la medicina alternativa, y poderla incluso combinar adecuadamente con la medicina convencional, pudiendo evitar así incluso mayores efectos adversos.
La comunicación adecuada entre médico y paciente, pueden llevar a una mejoría clínica más notable, respetando los diversos métodos de salud disponibles y más útiles para el paciente, tratando siempre de mantener una mejor calidad de vida.
Papadakis, Maxine A, McPhee, Stephen J. Diagnóstico clínico y tratamiento. 49º edición. San Francisco, California. McGraw Hill, 2010. 1524-1525.
1 Comentario
Había oido antes sobre el ginko biloba, sin embargo creo que como dice al final del artículo la comunicación es lo más importante, muchas personas que toman esto como un suplemento no lo comunican al médico .